Los mercados iniciaron la semana bajo un clima nebuloso. Tras varios meses de alzas, la volatilidad ha reaparecido con fuerza y los flujos han comenzado a rotar hacia sectores más defensivos.
El escenario va desde el entusiasmo tecnológico hacia la política monetaria, justo cuando la temporada de resultados corporativos llega a su fin y los datos económicos regresan gradualmente tras el cierre administrativo en EE. UU. La inteligencia artificial, que impulsó el rally de este 2025, muestra señales de agotamiento: el apetito sigue allí, pero el mercado ha dejado de tolerar decepciones o sorpresas positivas que lleguen “tarde”.
El ajuste se sintió en ambos lados del Atlántico. El S&P 500 retrocedió un 2% y índices europeos cayeron más de un 2% en la semana pasada. El daño pudo ser mayor, pero el viernes se produjo un punto de inflexión gracias a las declaraciones del presidente de la Fed de Nueva York, John Williams, quien sugirió que existe margen para un nuevo recorte de tasas en la próxima reunión del 10 de diciembre. Con esto la probabilidad implícita de un recorte saltó del 36% al 70%, recordando que en mercados frágiles los bancos centrales no solo influyen con decisiones, sino también con expectativas.
Ni siquiera Nvidia, pese a resultados que superaron las expectativas, logró revertir la tendencia. La mejora se evaporó rápidamente ante un sentimiento que hoy penaliza los excesos de optimismo. El mercado reconoce que la IA concentra valoraciones elevadas, pero el temor a quedar fuera del próximo impulso vuelve errática la corrección.
Mientras tanto, el mercado de deuda se mantiene en calma, el rendimiento del bono a 10 años permanece bajo 4,15%, a pesar de que aun un recorte en diciembre es incierto. La renta fija parece asumir que el ciclo de relajación monetaria se ha retrasado, pero no se ha desactivado.
En el frente macro, la semana traerá datos que pueden mover el tablero. En EE. UU. se publicarán el martes las ventas minoristas y precios del productor de septiembre, y los pedidos de bienes duraderos el miércoles. Además, el Black Friday actuará como un termómetro real del consumo, veremos si la narrativa de desaceleración podría intensificarse.
Finalmente, la temporada de resultados corporativos entra en su tramo final con publicaciones pendientes de Alibaba, Dell, Compass, entre otros. El jueves será feriado en EE. UU. por Acción de Gracias, reduciendo volumen. Tras meses de avances consecutivos, noviembre parece marcar una fase de transición: el mercado deja el terreno de la euforia y entra en uno donde la paciencia vuelve a depender de los datos, veremos como avanza esta semana previa al ultimo mes de este 2025.